PARRESÍA | PENSAMIENTO
Toda mi vida
evitando lo áspero,
suavizando las aristas,
cubriendo verdades.
A lo largo de mi vida
he aprendido a callar,
a elegir las palabras
como quien pisa vidrio,
asumiendo el miedo.
Dejando que el silencio
me envuelva,
me proteja.
He sabido esquivar
las verdades hirientes,
las que queman la lengua
y destruyen la paz.
Porque qué importa
decirlo todo
si las palabras
también condenan.
Puede que no sea lo valiente,
pero es lo que me deja vivir.
0 comentarios:
¡Deja tu comentario!